Un estudio publicado por la revista Nature, elaborado por un equipo de 18 científicos de todo el mundo, da cuenta que la Tierra se acerca a un punto de inflexión que podría tener consecuencias similares a las que tuvieron lugar hace 12.000 años, cuando comenzó el periodo interglacial actual. Según este informe, a pesar de todo lo que se habla sobre el calentamiento global es muy poco lo que la humanidad ha hecho para evitar el desastre. Según el informe, “el colapso podría ser drástico y repentino, transcurriendo mil años desde su comienzo hasta que culmine, cambiando nuestro planeta completamente.”
En NeoTeo hemos reflejado en muchas oportunidades la problemática del calentamiento global. No hay dudas que el clima del planeta está cambiando, y aunque no tengamos muy claro si estos cambios son de origen natural o son provocados por el hombre, lo cierto es que -de continuar en este sentido- tarde o temprano seremos afectados gravemente por sus consecuencias. Un grupo de 18 científicos, pertenecientes a diferentes países, han publicado un artículo en la revista Nature en el que expresan su preocupación por el futuro inmediato de nuestro planeta. Concretamente, dan cuenta de como varias teorías científicas, modelos matemáticos y registros geológicos muestran que estamos dirigiéndonos hacia un “colapso planetario inminente”. Según estos especialistas, todo el mundo habla sobre el calentamiento global, el aumento de los desastres naturales atípicos y los cambios que evidentemente se están produciendo en el planeta, pero no se hace prácticamente nada al respecto.
Arne Mooers, uno de los autores del estudio, afirma que “la Tierra se acerca hacia una situación muy similar a la que tuvo lugar hace 12 mil años, cuando ocurrió el cambio de la era glaciar al período actual, conocido como interglaciar.” Se sabe que algunos de los factores que provocan el cambio climático tienen origen natural, pero otros, como las fluctuaciones extremas de la biodiversidad impulsadas por la necesidad de alimentar y albergar a 7 mil millones de personas o la quema de combustibles fósiles, tienen su origen en las actividades humanas. El pequeño presupuesto que los principales gobiernos del mundo destinan para reemplazar las actuales fuentes de energía, por ejemplo, son insuficientes para modificar significativamente la tendencia al cambio que reflejan las estadísticas. De mantenerse este escenario, los investigadores aseguran que “el colapso podría ser drástico y repentino, transcurriendo mil años desde su comienzo hasta que culmine, cambiando nuestro planeta completamente.” Mooers cree que lo más preocupante es que a pesar de las pruebas presentadas en reiteradas oportunidades, “los seres humanos no han hecho nada realmente importante como para evitar lo peor” y que “una vez iniciado el proceso de transformación, no habrá vuelta atrás”.
Un índice que refleja los cambios, elaborado por este equipo y que tiene en cuenta diferentes factores, indica que estamos en un 43% de una escala que, de alcanzar el 50%, entraríamos en una etapa de cambios irreversibles. Obviamente, uno puede permitirse dudar si tales afirmaciones son veraces, si los estudios presentados son exactos o si realmente se está exagerando la gravedad de la situación actual. Pero dado que lo que está en juego es nada más sin nada menos que el futuro de la humanidad en nuestro planeta, no estaría nada mal analizar el problema en profundidad y comenzar a trabajar para revertirlo. ¿No te parece?