¿Aviones? ¡Eso es cosa del pasado! Ahora, los que realmente tienen dinero, pueden tener su propio yate dirigible aéreo. ¡Steampunk hecho realidad!
¿Te imaginas tu propia oficina aérea? ¿Una mansión, prácticamente, que surque los cielos mientras tú chateas por Internet? Con más de 1500 metros cuadrados, el yate privado/corporativo Aeroscraft ML866 está pronto a sobrevolar los cielos. Esperemos que ninguno de los que se suba se acuerde de Hindenburg.
El dirigible Aeroscraft ML866 alcanza unos 220Km. por hora (por lo tanto no muy apto para viajes transatlánticos) y, en sus 1500 metros cuadrados, tiene lujos impensados en las limitadas dimensiones de un avión. Cuenta con despegue vertical y la capacidad de aterrizar en lugares no preparados para tales cuestiones. Esto lo convierte en casi irresistible para los ricachones que, aunque tengan jet privado, tienen que aguantar la congestión de los aeropuertos modernos.
Este lujoso dirigible aéreo tiene todo lo necesario para ser un centro de operaciones empresariales: una oficina llena de ordenadores, capacidad para vídeo conferencias, todo tipo de comunicaciones y un interior transformable. ¿Algo más? Sí, un cuarto de conferencia capaz de albergar hasta 100 personas y televisores de plasma más grandes que toda tu casa.
Sí, el vehículo perfecto para todo genio maligno que desee contemplar a la plebe mientras urde estrategias de dominación mundial. Este dirigible lo usa como Fortaleza del Mal y utiliza platillos voladores para sus esbirros demoníacos.
- Un verdadero yate aéreo
- Como que parece una ballena voladora, ¿no?
