Windows ofrece por defecto un método bastante eficiente para administrar servicios, pero pueden existir ocasiones en las que este método pueda verse comprometido. También debemos tener en cuenta la necesidad de una adminsitración remota de estos servicios, para modificar el comportamiento de otro ordenador, o solucionar un problema específico. Si te enfrentas a cualquiera de estas situaciones, entonces deberías darle un vistazo a esta pequeña aplicación que simplemente se llama Service Manager.
Los caminos clásicos suelen ser dos: O ingresas a la sección Servicios dentro de Herramientas Administrativas en el Panel de Control, o escribes “services.msc” en la caja de ejecución para invocarla directamente. Si Windows funciona correctamente, cualquiera de estas dos rutas es válida, pero siempre puede surgir alguna complicación. Si un virus ha hecho de las suyas, puede que ni siquiera seas capaz de abrir el panel de control, o de usar una caja de ejecución. Incluso el mismo services.msc podría quedar fuera de tu alcance. Utilizar un administrador de servicios alternativo tal vez no sea suficiente para evadir temporalmente a estas trabas, pero antes de comenzar con una cirugía más profunda, puede que este sencillo programa logre sacarte del apuro.
Service Manager hace literalmente lo que indica su nombre: Ofrecer una vía rápida y sin obstáculos para administrar los servicios de Windows. Cuenta con diferentes filtros que pueden aislar los servicios activos, inactivos, pertenecientes a Microsoft, propios y compartidos, además de los clásicos filtros de texto. Service Manager también puede cargar la lista de controladores, sean derivados del kernel o del sistema de archivos. En caso de que necesites realizar una administración remota de servicios, Service Manager cuenta con una opción de conexión, aunque eso requiere de las conexiones de red y los privilegios de sistema correspondientes.
Y hablando de privilegios, Service Manager también está limitado por privilegios de administrador. El programa cuenta con un acceso rápido para elevar los privilegios del ejecutable, pero si la configuración actual de Windows no permite esto, entonces no podrá cambiar el estado de los servicios. Service Manager cuenta con una conveniente versión portátil que buen puede terminar en nuestros pendrives de mantenimiento. En general, son contadas con los dedos de una mano las ocasiones en las que un usuarios debe lidiar con los servicios, pero si te topas con una de ellas, y por alguna misteriosa razón el services.msc se negara a cooperar, no dudes en probar a Service Manager.