Lisandro Pardo
Ya hemos visto a muchos coches con paneles solares integrados, pero sus diseños siempre están enfocados sobre funcionalidad y rendimiento, dejando a un lado a la estética. El nuevo concepto C-Max Solar Energi de Ford no sólo tiene una apariencia atractiva, sino que modifica el uso de los paneles solares al recargar las baterías de un diseño híbrido, en vez de alimentar al coche directamente.
“¿Por qué los coches eléctricos no tienen paneles solares en sus techos?” La pregunta es simple y lógica a la vez. En esencia, un coche eléctrico que pueda aprovechar la abundancia del Sol se convertiría en un coche solar, y con un paquete de baterías adecuado, su dependencia de la red eléctrica sería nula. El problema es que un coche de tamaño normal (piensa en algo como un sedán) requiere mucha más energía de la que pueden proveer los paneles solares hoy. A modo de ejemplo, el Tokai Challenger, uno de los mejores coches solares del mundo, tiene un peso de 160 kilogramos, mientras que un Ford Focus (vehículo relativamente popular) está en el orden de los 1.300 kilogramos. Desplazar semejante masa es un desafío mucho más complejo.
Con esa restricción en mente, los diseñadores deben realizar varios compromisos, pero nunca dejan de poner a prueba los límites. Así es como nos encontramos con el Ford C-Max Solar Energi, un concepto basado en el híbrido C-Max Energi que actualmente se encuentra en el mercado a un precio promedio de 33 mil dólares (sin incluir subsidios locales). Los paneles solares instalados en el techo son de la empresa SunPower, modelo X21, con una eficiencia del 21 por ciento. Esta configuración puede generar unos 300 vatios de potencia, un valor insuficiente para recargar el paquete de baterías en un día. El truco al que apela Ford es un concentrador solar, basado en lentes Fresnel. Al concentrar la luz solar sobre los paneles, el Ford C-Max Solar Energi logra capturar la energía necesaria para restaurar sus baterías. Sin embargo, hay algo más: Los cambios de posición del Sol afectan el rendimiento de todos los paneles solares, pero el coche tiene la capacidad de ajustar automáticamente su ubicación, manteniendo la luz concentrada sobre el techo de forma óptima. En caso de un día nublado o de un consumo más alto de lo normal, la recarga tradicional por tomacorriente sigue estando disponible.
Obviamente, el concepto tiene sus limitaciones. Después de reproducir el vídeo, calculo que habrás descubierto que el coche no puede recargar sus baterías en movimiento. La necesidad de infraestructura externa sin dudas afecta qué tan práctico puede llegar a ser el Ford C-Max Solar Energi, a pesar de que las lentes Fresnel de acrílico no suelen ser algo tan costoso. Una cosa que llama la atención es concentrar tanta luz solar sobre el techo de un coche. Existen casos documentados de vehículos derretidos por los rayos solares que atraviesan los cristales instalados en edificios públicos, por lo tanto, imagino que el Ford C-Max Solar Energi deberá ser un poco más robusto de lo normal. Aún así, espero ver más sobre este concepto.
