Internet es un lugar en donde podemos encontrar proyectos de hardware verdaderamente extraños, e incluso hay casos que tratan sobre hardware, sin lidiar directamente con él, como es el caso de la calculadora de papel o el procesador virtual a construir desde tu navegador, cosas que hemos visto en el pasado. También, y si uno busca bien, directo de Google Sites, podremos encontramos un procesador hecho de papel, un proyecto que ya tiene unos años pero que, a diferencia de los procesadores reales, ¡no se queda obsoleto!
Y no, no pienses en un chip de papel instalado sobre un zócalo, sino en una hoja de papel con todos los comandos, funciones y direcciones impresas, la cual si se usa de cierta forma, puede imitar el funcionamiento de un procesador de forma didáctica y bastante curiosa.
Una herramienta educativa
Ahora, ¿qué puede tener de interesante conocer cómo funciona un procesador? A decir verdad, lo único que le importa al usuario promedio es qué tan bien funciona y cuánto cuesta (entre otros factores), pero aquellos que están estudiando cómo diseñar hardware o están realizando algún peregrinaje al mítico lenguaje ensamblador, suelen tratar con estas cosas de forma muy frecuente. Por supuesto, cualquier reproducción en la funcionalidad de un procesador resulta bastante cruda.
El procesador tiene en papel a sus funciones, registros y estados, además de direcciones que simulan ser memoria RAM, y sus propios buses. El usuario debe saltar entre direcciones y datos de la misma forma en la que utilizaría a un ábaco. Es un procesador de solamente dos bits, pero el concepto es incluso compatible con la condición de desbordamiento.
Para utilizarlo se necesita, además de imprimir la hoja-procesador, un poco de collage para recortar el bus de dirección y el bus de datos. Si se necesita de un ejemplo más lineal, en la página hay una especie de tutorial con imágenes bien definidas sobre cómo recorrer paso a paso cada uno de los estados del procesador.
Una vez más, se podrá cuestionar en general la utilidad detrás de proyectos como este, pero lo mismo se podría decir del dibujo de un átomo, y no por lo crudo de un dibujo o lo sencillo de su imitación deja de ser menos interesante. Está claro que como humanos, no importa que tan listos seamos, somos lentos en comparación con un ordenador.
Lo que este usuario ha representado en papel sucede a una velocidad imposible de percibir para nosotros, al menos por medios naturales. Nunca está de más ver las cosas con una postura un poco más sencilla, aunque se trate simplemente de dibujar algo sobre un papel y utilizar un par de tijeras. Lo dicho, una excelente herramienta educativa para REALMENTE aprender cómo funciona un procesador, a una velocidad apta para humanos. ¡Vete a procesar!