Microsoft Bob 2.0: Laura, la cabeza que habla

¡Hola niños y niñas! ¿¡Quién quiere una cabeza flotante en su ordenador!? … bueno, según Microsoft, su sueño es que todos tengan a Laura en su PC, así que van a tener que cambiar esa actitud negativa. A ver, empecemos desde el principio. Según un artículo en el New York Times, Microsoft está diseñando una inteligencia artificial que ayudará al usuario con diferentes tareas y muchas de ellas no relacionadas al uso del ordenador. ¿Se parecerá a Microsoft Bob? Por Dios, esperemos que no.

¿Alguien recuerda a Microsoft Bob? ¡Por supuesto que no, si fue un fracaso! En 1995 Microsoft implementó un sistema de interfaz física para el escritorio. La idea era que Bob ayudara al usuario a hacer cosas en el escritorio, como abrir programas y escribir documentos. Una especie de Clippo en Microsoft Office, pero para toda la PC. El problema principal con esta innovadora interfaz era que era demasiado molesta. Te limitaba demasiado para hacer cosas bastante simples.

Ahora según leemos en el New York Times, Microsoft está trabajando en una interfaz física nueva, con tecnología de punta que tendría una inteligencia artificial muy avanzada. Aunque, por supuesto, no la han llamado Bob 2.0, sino Laura, no podemos evitar relacionarlo con el maldito anteojudo y su perro pulgoso.

Según dice el artículo, escrito por Ashlee Vance, el sueño de Microsoft es que cada usuario tenga una Laura en su ordenador personal. Es tan detallado el diseño gráfico y tan amplia la inteligencia artificial que tiene integrada que necesita de un procesador de ocho núcleos para correr de manera fluida. Al parecer el sueño de Microsoft no podrá hacerse realidad por ahora, ya que hoy en día el ordenador de hogar común más avanzado tiene hasta cuatro núcleos.

Aunque suene un poco psicótico, Laura solo será una cabeza flotante sin cuerpo. Y funcionará como asistente personal, haciendo tareas que van más allá del funcionamiento de tu ordenador. Entre algunas de las cosas que podrá hacer se encuentra: reconocer el estado de ánimo del usuario y asistirlo en temas de vestimenta, y otros.

Una de las cosas que más remarcó Microsoft sobre Laura es su habilidad para tomar decisiones sofisticadas sobre la persona que tiene enfrente, dependiendo en su ropa, su estado de ánimo (por ejemplo, si parece impaciente) y cosas más generales como su hora preferida para tener compromisos.

Hasta ahora todo lo que se sabe sobre Laura son ideas y conceptos, pero en caso de que Microsoft tenga éxito en su desarrollo, esta podrá ser la primera interfaz inteligente que realmente sirva. No como intentos anteriores como Bob o Clippo que necesitaban ayuda para ayudarnos (o en sus casos complicarnos), sino ayudarnos de verdad con temas importantes y no solo del funcionamiento del ordenador. No sé ustedes, pero la simple idea de que esto salga bien nos emociona mucho.