Si la memoria no me falla, fue en el año 2003 que el proyecto Damn Small Linux ofreció a los usuarios la posibilidad de ejecutar un sistema operativo básico con apps esenciales en apenas 50 megabytes. Damn Small Linux cayó en un virtual abandono a partir de 2012, y su página oficial llegó a desaparecer en más de una ocasión, pero a principios de febrero, el proyecto se reactivó con un cambio de estrategia: El nuevo «techo» para Damn Small Linux es de 700 megabytes, y utiliza a la distro antiX como punto de partida.
Honestamente no recuerdo demasiado de mi vida veinte años atrás, pero sí sé que no estaba en una buena posición. Poco trabajo, poco dinero, ciclos de hardware extendidos al máximo… incluso llegué a usar Windows XP en un Pentium II de 233 MHz, que ya tenía seis años sobre los hombros. Nuestras opciones eran modificar-optimizar-destripar a Windows XP para obtener todo el rendimiento posible, o tirar los dados con Linux.
Una de las apuestas en aquel entonces se llamaba Damn Small Linux, una distro lo suficientemente compacta como para iniciarse en una «Bootable business card» de 50 megabytes. Su objetivo era inyectar un poco más de vida en equipos 486 / Pentium, y por un tiempo funcionó, pero su desarrollo colapsó en algún punto de 2008, y el único chispazo adicional de actividad fue un Release Candidate en 2012. Esta situación parece haber cambiado a principios de febrero, y Damn Small Linux ahora cuenta con un nuevo build alfa.
Damn Small Linux en 2024
¿Por qué regresar después de tanto tiempo? Su creador indica que «vio la necesidad» de una distro funcional por debajo de los 700 megabytes, un techo artificial que la gran mayoría de los proyectos abandonó por completo. El salto en este límite era inevitable: Existen diferencias enormes entre «Linux de 2003» y «Linux de 2024», incluyendo drivers, aplicaciones, y hasta el propio kernel.
El nuevo Damn Small Linux se basa en una versión modificada de antiX 23 i386 (que a su vez utiliza Debian). Muchas de sus aplicaciones han sido reemplazadas, pero los principales beneficios de antiX no se fueron a ninguna parte, y definitivamente llama la atención ver a un sistema operativo no tomar más de 128 megabytes de RAM en idle (Windows 11 puede llegar a reclamar 15 veces esa cantidad, *con* optimizaciones).
Lógicamente, la etiqueta «Alfa 1» que acompaña a Damn Small Linux significa que hay muchos errores por corregir. Algunos usuarios han reportado problemas con apt, la terminal, y el soporte WiFi. En lo personal tuve inconvenientes para cambiar la resolución de la pantalla, y Fluxbox siempre demanda un proceso de adaptación, pero no es terrible que digamos. Si quieres experimentar, tienes el enlace más abajo.
Sitio oficial y descarga: Haz clic aquí
Me gusta mucho que alguien se acuerde de esas PC viejitas. Reutilizar maquinas que aún funcionan bien y darles nuevas posibilidades es algo, en mi opinión, genial.
Especialmente ahora que te piden 300+ dólares por una tarjeta gráfica low-end como si fueran monedas…