Un ejercicio, reglas precisas, y a simple vista… lo imposible. En la gran mayoría de los casos, lo único que busca un acertijo es obligarte a cambiar de perspectiva, analizar las cosas de un modo diferente. Repetir la misma solución siempre es muy tentador, pero un acertijo es más que suficiente para comprobar que a veces, simplemente «estamos ciegos». Por ejemplo, considera esto: Ocho números, de los cuales debes elegir tres para sumar un total de 30. El problema es que con los números disponibles, alcanzar el resultado deseado es imposible, a menos… que se nos esté escapando algo…
Acertijos. Son irresistibles, ¿verdad? Un par de días atrás descargué una copia de Samsara Room, desarrollado por la gente de Rusty Lake. Entré al juego sin esperar demasiado… y cuando lo terminé, eran las dos de la mañana, mi cerebro estaba derretido, y no pude hacer más que enviar un par de dólares en la dirección del desarrollador. ¿La mejor-peor parte? El juego dice que hay un secreto, y todavía no lo encontré.
Ese es el poder de los acertijos: Acaban con nosotros, pero siempre volvemos por más. Ni siquiera Einstein podía resistirse a ellos. Hemos capturado rebeldes, dividido el botín de piratas, volado en aviones mágicos. Y en esta oportunidad, tenemos ocho números: 1, 3, 5, 7, 9, 11, 13 y 15. El ejercicio requiere que tomemos tres de esos números (esto es obligatorio, no podemos usar dos) para sumar 30… pero es imposible. Sumar dos números impares nos da un par, sin embargo, cuando interviene un tercer impar, vuelve a ser impar. ¿Una ayuda antes de ver el vídeo? Muy bien: Prioriza el «acertijo», no lo matemático.
Entonces… la primera impresión es bastante sólida. Con esos números, es imposible escoger tres y sumar 30. Pero aquí es cuando surge el detalle, el cambio de perspectiva: Los números son presentados como bolas de billar… y en el billar, el 9 no es verde. Cualquiera que haya tenido la posibilidad de jugar Bola 9 sabe que es blanca con una banda amarilla. De hecho, todas las bolas a partir de la 9 siguen el mismo patrón (blancas con una banda).
En resumen, nuestro 9 es un 6 puesto de cabeza. Conociendo ese dato, 6 + 11 + 13 = 30. Para muchos, la primera impresión es la que cuenta, pero en ciertas ocasiones, está completamente errada.
11. 13 6 (9 dando vuelta)
El nueve al revés
Is so easy (es muy facil)
13,11,6 = 30 ( el 9 es el 6 )
Tarde menos de 2 minutos… me tomó más tiempo leer la consigna 😛
Está mal expresada la pregunta y tendría que ser el asertivo del Villar que la suma de 3 bolas dieran 30 y bueno ahí está el problema que la suma de impares jamás da 30 pero donde está el error para un jugador de Villar talvez sea más fácil y es que la solución está en la bola verde que no concuerda con el número y sumado a los dos impares está la solución 6-11-13=30
Si tomamos el 15 y lo ponemos en un circulo, en el siguiente ponemos juntos el 1 y el 5, así tenemos con tres números , 15 + 15= 30