Lisandro Pardo
Puede pasar en cualquier momento: El smartphone decide convertirse en buceador, termina bajo el agua, y su dueño entra en una crisis nerviosa. Rápidamente ingresa a la Web con otro dispositivo o consulta a sus amigos para saber qué hacer con un móvil mojado, y la recomendación número uno es introducirlo en una bolsa o recipiente con arroz. La hipótesis detrás de esta acción es interesante… pero en la práctica, no sirve. ¿Por qué? La gente de iFixit lo explica.
Ya sabemos bien que la electrónica y el agua (o para ser más precisos, la humedad) no se mezclan salvo que se cumplan ciertas condiciones. Lavar un PCB es posible (muchos profesionales usan limpiadores ultrasónicos, y el fluido principal es agua destilada), pero debes encargarte de desplazar toda la humedad antes de activar su fuente de energía.
Cuando un smartphone termina mojado (ya sea de forma parcial o total), la primera sugerencia es cubrirlo con arroz y dejarlo allí por 24 horas. La hipótesis indica que los granos de arroz actúan como receptores para la humedad, y ese desplazamiento desde la electrónica hacia los granos salva al teléfono. El problema es que no funciona como creemos.
La gente de iFixit (conocida por sus fabulosos kits de reparación y tutoriales) habló con Jessa Jones del portal iPadRehab, quien ha visto una buena cuota de tablets y móviles sumergidos. Lo primero que debemos entender es que la corrosión actúa de forma instantánea cuando toca a un teléfono, y lo segundo es que al colocarlo en arroz, lo único que hacemos es darle tiempo a la corrosión para que avance. Sí, a veces tenemos suerte y el móvil responde después de un chapuzón, pero la corrosión sigue haciendo de las suyas sobre puntos de soldadura y conectores.
La verdadera solución, o para ser técnicamente correctos, la más completa, va en contra de nuestro instinto: Que el móvil no se seque. Hay que desensamblar el teléfono por completo, extrayendo batería, tarjeta SIM y tarjetas de memoria. Con la excepción de la pantalla y las cámaras, todas sus piezas (en especial la placa base) deben recibir una sesión de alcohol isopropílico al 90 por ciento, usando un cepillo de dientes blando.
¿Qué hacemos con los móviles «sellados» que no tienen una batería removible? La respuesta es exactamente lo mismo, y aquí es cuando todos toman el atajo del arroz. ¿Por qué? Porque algunos móviles requieren herramientas especializadas para su apertura. Si no existen los recursos (técnicos o económicos) para abrir al teléfono, la prioridad es soplar y succionar todo el líquido posible, dejar que el aparato finalice su secado al aire libre (o asistido por un pequeño ventilador) y cruzar los dedos. Será más efectivo que el arroz.
Fuente: iFixit
Cómo luce un teléfono móvil bajo un microscopio (vídeo)
Siento decirlo pero es el caso de los iPhone o de ese modelo, el resto, la gran mayoría hace unos años tienen protección contra líquidos y NO les afecta tanto, y SI, si funciona ponerlo en arroz
A mi me funciono, 5 veces, uno con mi celu y otras 4 con otros de amigos, no se vio dañada la placa, duro 3 años luego del incidente