Lisandro Pardo
La ola futurista tomó por asalto a los hogares del siglo XX, y rápidamente alcanzó a múltiples accesorios. En el pasado hemos visto su influencia sobre los televisores, con el inolvidable Philco Predicta a la cabeza, y también lo que hizo (o planeaba hacer) en un sector crítico como la cocina. Sin embargo, estaríamos cometiendo un serio error si olvidamos al Ericofon, teléfono que Ericsson comercializó a partir de 1954. Es un verdadero imán para los ojos, apareció en docenas de películas y series, y la Web ofrece una buena cantidad de unidades, tanto originales como réplicas…
La historia nos dice que el diseño del Ericofon comenzó a fines de 1940 gracias al equipo formado por Gösta Thames, Ralph Lysell, y Hugo Blomberg. Hasta ese momento, el tubo y el sistema de marcado eran dos componentes separados, pero el Ericofon fue el primer teléfono comercial en adoptar una especie de formato all-in-one.
Conocido en otras regiones como «el teléfono cobra», el Ericofon ingresó a su fase de producción general en 1954. Al principio, sólo algunas instituciones tuvieron acceso a él, y se volvió relativamente popular en los hospitales debido a su versión muda sin «campanilla».
El Ericofon llegó a los hogares europeos y australianos en 1956, pero el mercado estadounidense presentó un poco de resistencia. El problema mayor era que Bell Telephone, usando y abusando su posición monopólica, se negaba a autorizar la conexión de teléfonos desarrollados por terceros en su red.
Después de muchos reclamos, Bell finalmente cedió y permitió un uso inicial «institucional y limitado» del Ericofon, aunque manteniendo el costo de alquiler como si el teléfono fuera de la compañía. El número original de colores ascendía a 18, y a pesar de lo que sugieren las imágenes, no fue producido en negro (el modelo «charcoal» se acerca bastante).
Bell tenía razones de sobra para temer al Ericofon. Las ventas en los Estados Unidos explotaron (excediendo la capacidad de producción en un 500 por ciento), y como respuesta, Ericsson se transformó en socio mayoritario de la compañía que lo fabricaba y comercializaba al otro lado del charco, North Electric.
El mercado habló, y Ericsson decidió eliminar a los colores con menor demanda de su catálogo, bajando el total a 8. En 1967 debutó el primer Ericofon con tecnología TouchTone, pero un error en su diseño lo dejaba inutilizado si caía con demasiada fuerza sobre la mesa.
North Electric interrumpió la producción estadounidense del Ericofon en 1972, sin embargo, el llamado «Modelo 700» fue lanzado en 1976 a modo de celebración por los 100 años de Ericsson. Tenía teclado en vez de disco pero no era Touch Tone, marcaba sólo en pulso, nunca se vendió muy bien y jamás cruzó el Atlántico.
Las imágenes lo dicen todo: Se ve genial donde sea que lo instalen, y es mucho más incómodo de usar de lo que imaginamos. Ahora, si sólo existiera una versión inalámbrica…
Fuente: Ericofon.com
(Del Archivo de NeoTeo, artículo publicado originalmente el 9 de Febrero de 2019)
