Lisandro Pardo
Se acerca el fin de semana y nuestro Raspberry Pi nos observa desde el escritorio. ¿Qué podemos hacer con él? ¿Qué idea nueva deberíamos explorar? Existen muchos proyectos para desarrollar a través del software, pero el mini ordenador alcanza su máximo potencial una vez que lo combinamos con una amplia selección de componentes. Afortunadamente no es difícil encontrar kits para Raspberry Pi que incluyen docenas de partes a un costo muy razonable, y hoy vamos a presentar una humilde selección.
Los experimentos más avanzados que involucran al Raspberry Pi usualmente tienen sensores dedicados, una buena dosis de robótica, y un dominio básico de lenguajes como Python. Al final del día, no es suficiente con conectar componentes al mini ordenador, por lo que debemos encontrar la forma de «hablar» con ellos. Pero más allá de los tutoriales, las guías paso a paso, y el copypaste de scripts Python que nos hacen la vida más sencilla, necesitamos tener a esos componentes en nuestro arsenal.
Los mejores kits para Raspberry Pi
La buena noticia es que no son tan caros, en especial cuando los adquirimos en la forma de kits para Raspberry Pi, y con el uso general del GPIO, su compatibilidad se extiende a todas las versiones. Al mismo tiempo, el concepto de kit también llega a quienes todavía no poseen un Raspberry Pi y desean comprar todo desde cero. A continuación presentaremos una selección de kits que alcanzan a ambos casos, y que seguramente cubrirán tus exigencias.
Kit RFID Freenove para principiantes
[amazon box=”B06VTH7L28″]
Docenas de componentes pasivos, motores, relés, un joystick, servos, un sensor RFID acompañado de un llavero y una tarjeta compatible, un módulo de energía, dos matrices LED, pantalla LCD, teclado, cables, breadboard, y un excelente extensor GPIO son apenas una fracción del impresionante kit RFID que vende Freenove. No te dejes engañar por la etiqueta «RFID» aquí. El kit es muy flexible, y eso lo convierte en un sólido punto de partida para cualquier entusiasta.
Kit de iniciación Kookye con mando a distancia
[amazon box=”B01MDUP97N”]
Tal vez un poco más simple que el anterior, pero no por eso menos interesante. Entre todos los kits para Raspberry Pi, la opción de Kookye se vuelca en favor de la tecnología infrarroja con un sensor de movimiento, un receptor dedicado, y un mando a distancia. También incluye un sensor DHT11 de humedad, un módulo BMP180 de presión atmosférica, tres fotosensores GL5516, 24 luces LED y más de 50 resistencias para comenzar a trabajar en el protoboard. Todo viene guardado en una práctica caja plástica, junto a un CD con varios proyectos.
Kit de sensores Kuman 38 en 1
[amazon box=”B017YL3N6K”]
¿Por qué conformarse con tres o cuatro módulos aislados cuando podemos tenerlos a… casi todos? El kit 38 en 1 de la gente de Kuman prácticamente no deja títere con cabeza. Presión, temperatura, movimiento, infrarrojo (emisión y recepción), luz, tacto, encoder, joystick… digamos que sería difícil de creer si tu proyecto no llega a buen puerto con este batallón de sensores como aliado en tu mesa de trabajo. (Kuman también ofrece una variante en Arduino)
Kit Globmall ABOX para Media Center
[amazon box=”B07547ZPGP”]
Los tres kits que hemos visto hasta ahora tienen algo muy importante en común: No incluyen al Raspberry Pi. Si has llegado a este punto con las manos vacías y buscas una buena base, la respuesta está en el kit Globmall ABOX. Trae un Raspberry Pi 3B, carcasa, tres disipadores, tarjeta microSD de 32 GB, lector USB de tarjetas, cable HDMI y una fuente de alimentación de 2.5A con interruptor. Nada mal por 80 euros, pero no olvides que hay otras alternativas de carcasas allá afuera.
Vilros V-Kits con Raspberry Pi 3 B+ para consola retro
[amazon box=”B07CRK6C27″]
El kit anterior utiliza al Raspberry Pi 3B estándar, y su distribuidor lo presenta como una vía óptima para convertir al mini ordenador en Media Center, ¿pero qué sucede cuando la prioridad es una consola retro? Ahí es cuando interviene el V-Kits de Vilros, con un Raspberry Pi 3B+ (quad-core a 1.4 GHz), carcasa que imita al Nintendo NES, dos disipadores, tarjeta de 32 GB, lector USB, fuente, cable HDMI, y dos gamepads compatibles. Su descripción indica que RetroPie ya está cargado en la tarjeta, pero nada te impide reemplazarlo por Recalbox. Una gran opción en kits para Raspberry Pi.
Kit PiHut Zero Essentials
[amazon box=”B06XCYGP27″]
Tal vez algunos de nuestros lectores crean que no estamos hablando lo suficiente sobre el Raspberry Pi Zero, y es algo que pretendo corregir con este pequeño kit. El PiHut Zero Essentials trae al mini ordenador en versión Zero W con WiFi, adaptadores HDMI y USB, una carcasa de lata que nos recuerda a los caramelos Altoids, pines para soldar en el GPIO, cuatro patas de goma… y eso es todo. No por nada se llama «Essentials», y aunque debemos sumar tarjeta de memoria y fuente de alimentación, la inversión inicial es de apenas 25 euros.
Kit de controles EG STARTS 2 para arcade
[amazon box=”B077J2WGKT”]
¿Consola retro? ¿Qué tal réplica de máquina recreativa a tamaño completo, con palancas y botones como los que usábamos antes? El Raspberry Pi no sólo hace eso posible, sino que además existen kits al estilo del EG STARTS 2, con dos joysticks, dos encoders USB de baja latencia, y 20 botones para presionar y golpear como locos. El kit sugiere usar MAME, pero con mínimos ajustes de configuración, tanto RetroPie como Recalbox funcionarán muy bien.
Eso es todo por ahora. Si la búsqueda de kits para Raspberry Pi te trajo hasta aquí, entonces espero haberte ayudado. Si planeas comenzar desde el principio, hay tres opciones para elegir, y si planeas una recreativa en escala 1:1, sólo te pido que compartas algunas imágenes porque quiero verla terminada. ¡Buena suerte!
[amazon box=”B01CD5VC92″]
[amazon box=”B07BFH96M3″]
