Lisandro Pardo
En estos últimos días, los brazos robóticos han recibido una atención especial gracias a la intervención de figuras famosas, pero los desarrollos en materia de piernas robóticas tampoco pasan desapercibidos. Las más recientes novedades nos llevan a CYBERLEGs, un proyecto financiado por la Comisión Europea que busca crear piernas robóticas inteligentes con la capacidad de adaptarse a las necesidades y el ritmo de cada usuario.
Impresión 3D, miniaturización, sensores, materiales livianos, baterías de alta densidad, robótica. Combinar a todos estos elementos para desarrollar las prótesis del futuro no es sencillo, pero los expertos en cada campo nos han demostrado una y otra vez que vamos por el camino correcto. En más de una ocasión he hablado sobre la erradicación de la silla de ruedas. También me gusta pensar que las prótesis tradicionales son cada vez más obsoletas, y que aquellas personas con limitaciones en su movilidad pronto tendrán acceso a sistemas significativamente superiores. Uno de esos sistemas nace del proyecto CYBERLEGs, financiado por la Comisión Europea, y que involucra a investigadores de al menos tres universidades.
La página oficial del proyecto describe como objetivo principal el desarrollo de un sistema cognitivo artificial que sirva como reemplazo funcional para personas con amputación transfemoral (por arriba de la rodilla). Cuando se reemplaza a una prótesis convencional por una de las CYBERLEGs, el paciente puede desplazarse hacia atrás y hacia adelante, subir y bajar escaleras, sentarse y levantarse de la silla con un esfuerzo energético mínimo. La integración de sensores (tanto de presión como de movimiento), el uso de algoritmos avanzados y un estudio detallado sobre los movimientos del paciente permiten a las piernas robóticas interpretar con mayor precisión sus intenciones, al mismo tiempo que reducen el riesgo de una caída. De ser necesario, el paciente puede recibir un soporte pélvico adicional, que ayude en el movimiento de sus caderas.
Tal y como se aprecia en el vídeo, las pruebas con las CYBERLEGs han generado resultados sorprendentes. Con los fondos adecuados y el apoyo técnico de compañías interesadas, las primeras piernas derivadas del proyecto CYBERLEGs podrían llegar al mercado dentro de dos o tres años. Ahora, el siguiente paso es miniaturizar a todo el sistema, reducir el consumo de energía (la configuración actual funciona por tres horas) y optimizar su estética. Ante todo, paciencia. El proyecto lleva tres años en desarrollo. Quién sabe lo que podrán lograr con tres años más…
