Seguimos con la música de 8-BIT, más que nada porque nos gusta mucho. En este caso se trata de un joven cuyo proyecto ha dado qué hablar. 8BITar Hero necesita (como mínimo) de dos personas, una jugando a un juego de NES y otra jugando a un clon de Guitar Hero (al estilo D-Pad Hero), tocando la música que sale del otro juego. Sí, así de complicado es. Pero debemos admitir que, aunque todavía falta para verlo en acción, estamos muy emocionados con lo que puede resultar.
Hace pocos días informamos de la finalización del proyecto que llevó a cabo Ben Heck para transformar una vieja Commodore 64 en un ordenador portátil. Esto nos condujo a estado meditativo y nos hizo valorar las increíbles cosas que pueden lograr quienes tienen cierto conocimiento en un área y la voluntad para llevarlas a cabo. Este también es el caso de un joven, cuyo nombre no hemos podido conocer, pero que tiene entre manos un proyecto muy interesante.
8BITar Hero es algo extraño, así que intentaremos explicarlo lo más claro posible. Básicamente, la idea es que mientras una persona este jugando un juego de NES (en un emulador), otro esté tocando la música del juego en una especie de clon de Guitar Hero. Es decir, el último toca la música que sale del juego, mientras el otro lo juega. Según su creador, en la NES podrían jugar hasta dos personas y en el clon de Guitar Hero, hasta cuatro.
La primera vez que lo vimos nos recordó inmediatamente al juego de Dylan Fitterer, Audiosurf. Porque de cierta manera también tiene música procesal incluida. Sin embargo, si hacemos un análisis más cercano, podremos ver las diferencias que existen entre ellos. La más notoria claramente es que a diferencia de un MP3, la música que sale de un juego puede variar, porque cada movimiento que hace tiene un sonido diferente. Es por eso que se dice que es “música procesal”, porque la analiza y crea las notas a tocar en el momento.
Si aún te preguntas qué es música procesal, es fácil de explicar. En computación se refiere como procesal a cualquier contenido que se cree en el momento, sin que se haya programado antes. En este caso es música procesal porque el sonido sale directamente del juego de NES y puede variar dependiendo de lo que haga el jugador. A medida que suena, el sistema debe analizar el audio y transformarlo en lo que aparecerá en pantalla.
Y esta es una de las cosas que hace tan grandioso este proyecto. No estamos al tanto de su conocimiento en el área de programación (tampoco es que nosotros sepamos mucho), pero si hay algo que está claro es que no es algo simple de desarrollar. Sin embargo, él lo logró sin la ayuda de nadie… bueno, tal vez sí recibió ayuda, pero hasta donde nosotros sabemos, lo hizo todo solito. ¡Bien por él!
Más allá de lo original de la idea y, lo grandioso del resultado, su creador no le ve mucho futuro comercial. Actualmente lo está desarrollando como un trabajo para su Universidad y, según dijo, existe la posibilidad de que, una vez finalizado, lo suba para ser descargado por quien quiera, pero solo si queda satisfecho con el resultado final. Así que no hay otra opción más que esperar a ver cómo concluye todo. Desde aquí lo esperamos con ansiedad y lo felicitamos por tamaño logro.