La dinámica entre el cine y la música es tan compleja que en algunas ocasiones sucede esto: Celebramos el soundtrack, y nos olvidamos de la película (o queremos hacerlo). Otro aspecto llamativo es que no se trata de un fenómeno reciente, y los entusiastas del séptimo arte probablemente puedan compartir ejemplos que se remontan varias décadas en el tiempo. Hoy voy a mencionar algunas películas que apenas lograron sobrevivir a la crítica, pero nos dejaron canciones a las que vale la pena regresar.
Saturday Night Fever (1977)
Casi medio siglo después de su estreno oficial, las aguas siguen divididas en relación a Saturday Night Fever y sus virtudes como película, pero no hay conflictos cuando se habla de su música: Tanto Stayin’ Alive de los Bee Gees como Disco Inferno de The Trammps marcaron a una generación, aprovechando el pico máximo de popularidad de la era disco.
Flash Gordon (1980)
¿Puede ser mala una película a la que ví más o menos 30 veces? Mi versión «40-plus» sugiere que Ornella Muti tuvo mucho que ver con eso, pero Max von Sydow también me pareció fabuloso e inolvidable en su papel de Ming. A veces la crítica puede ser injusta, sin embargo, lo que nos reúne aquí es la música de Flash Gordon… y eso quedó a cargo de Queen. Este fue su primer soundtrack para el cine, seguido por Highlander en 1986.
Maximum Overdrive (1986)
Primera y única aventura de Stephen King como director. El Rey del Horror quedó tan decepcionado con el resultado que esencialmente se repudió a sí mismo, la llamó «una película boba», y prometió no volver a dirigir jamás. A pesar de eso, el escritor tuvo un gran acierto… que fue la selección de su música: King es fan de AC/DC, y su álbum Who Made Who se convirtió en el soundtrack.
Cocktail (1988)
Tom Cruise fue, es, y seguramente seguirá siendo una garantía de taquilla, no importa si la película es buena o mala. La crítica destruyó a Cocktail en múltiples niveles, pero eso no le impidió recaudar casi nueve veces su presupuesto original, y como si fuera poco, dejó sobre la mesa un soundtrack bastante sólido, liderado por esa canción que nos hace soñar con vacaciones interminables…
Batman Forever (1995)
De alguna manera, esta tercera entrega del vigilante encapotado rompió varios récords al momento de su estreno, superando a tanques como Jurassic Park, y recaudando 20 millones de dólares en apenas un día. Si dejamos a un lado la ridiculez, la exuberancia, el exceso de color y los pezones en el traje de Batman (?), encontramos dos excelentes hits: Hold Me, Thrill Me, Kiss Me, Kill Me de U2, y Kiss from a Rose de Seal.
Godzilla (1998)
No no, no esa Godzilla, la otra Godzilla. Ya sabes: ¿Matthew Broderick y Jean Reno corriendo por New York? ¿El ejército estadounidense usando pescado como cebo? Sí, esa Godzilla. Lamento haberla traído de regreso, pero si hay algo para rescatar aquí, es su soundtrack: La selección de canciones fue tan buena que llegó al número 2 del Billboard 200, y se convirtió en disco de platino.
Armageddon (1998)
Y pensar que fui a verla al cine… (suspiro). Me costó mucho trabajo recuperarme de la confusión constante y la sobredosis de banderas estadounidenses que Michael Bay puso en pantalla. Sin lugar a dudas, Armageddon fue uno de los ejemplos más contundentes de «superpatriotismo pre-9/11»… pero al menos nos quedó la certeza de que Aerosmith no falló. I Don’t Want to Miss a Thing es un gran tema.
Daredevil (2003)
Si crees que el estado actual del MCU es malo, te aseguro que el pre-MCU era peor. Muchos dicen que el Director’s Cut de Daredevil rescata a la película del abismo… pero yo no soy parte de ese grupo. De hecho, creo que lo único bueno que salió de ese proyecto fue la explosión de popularidad que envolvió a Evanescence. El éxito de Bring Me to Life dio lugar a Fallen, un bálsamo para todos los que sufrimos el impacto del cambio de siglo…
Tron: Legacy (2010)
Una mención bajo protesta, debo admitir. Disfruté muchas cosas de Tron: Legacy, desde el regreso de Bridges y Boxleitner hasta Olivia Wilde usando spandex (!), y sería un grosero error olvidarme de Michael Sheen. Lamentablemente, los críticos le clavaron un 5/10 y enterraron cualquier posibilidad de una secuela… pero al menos reconocieron el valor del soundtrack: Daft Punk acabó con todo a su paso. Si no quieres ver la película, perfecto. Pero debes escuchar ese disco.
¡La décima es tuya!
¿Creías que ibas a quedar afuera? ¡No! Es un tema complicado para explorar, y seguramente me he olvidado alguna película que tú recuerdas a la perfección. Los comentarios están abiertos, y si quieres mencionar más de una, no hay problema.