A diferencia de otras cosas, tanto la matemática como la física intentan “buscar” una respuesta en vez de simplemente darla. En la mayoría de los casos se necesitó de un tiempo prudencial y toneladas de estudios para llegar a esas respuestas, usualmente simbolizadas a través de ecuaciones. El vídeo que verán a continuación nos enseña a diez de las ecuaciones que han cambiado al mundo, desde el Teorema de Pitágoras hasta la archifamosa E=mc².
Ecuaciones, ecuaciones. Algunos las sufren en la escuela, mientras que para otros son relativamente comprensibles. Probablemente lo más atractivo de una ecuación está en que suele ser presentada como una respuesta en sí misma, una especie de “comodín”. También existe la cuestión de su “reconocimiento”, o por qué no, “popularidad”. Si yo hablo de la equivalencia entre masa y energía tal vez me miren como si fuera un extraterrestre, pero sólo basta con escribir E=mc² para que me entiendan mejor. Ahora, esta derivación de Einstein es una verdadera “estrella de rock” dentro de la física, pero no es la única. Hay otras ecuaciones, otras fórmulas y otros teoremas que han cambiado el mundo, aunque no sea en una forma tan explícita y evidente.
El vídeo que acabas de ver nos enseña diez “expresiones”, y lo digo así porque estoy seguro de que habrá comentarios apuntando a que algunos de estos ejemplos no deberían interpretarse como ecuaciones. Lamentablemente, el creador no explica el criterio utilizado para establecer el orden. En lo personal, creo que lo más lógico hubiese sido ubicar cada entrada en forma cronológica, para evitar pensar que una expresión es “más valiosa” que otra. Después de todo, no tiene mucho sentido enfrentar al modelo Black-Scholes con el Teorema de Pitágoras (a menos que alguien decida realizar un combate al estilo “Epic Rap Battles of History”).
Si me permiten escoger una (todos están invitados a expandir esta lista a través de los comentarios, pero recuerden: Yo no hice la elección original), sería la Segunda Ley de la Termodinámica. No sólo explica la entropía y establece la imposibilidad de las máquinas de movimiento perpétuo, sino que tiene el potencial de definir el mismo destino del Universo. En algún momento hablamos sobre la “muerte térmica del Universo”, y resulta inevitable citar a “La Última Pregunta” de Isaac Asimov, un cuento corto que no me voy a cansar de recomendar. Si la entropía (eventualmente) puede “ganarle a todo”, entonces creo que merece una atención especial.