Terminator: Genisys, o cómo derretir cerebros con un trailer

Hasta este punto creímos haber interpretado correctamente los hechos de la saga Terminator. Sin embargo, ya sabemos bien cómo son los viajes en el tiempo. Pasado y futuro se convierten en un lienzo para héroes y villanos, tanto clásicos como nuevos. En otras palabras, hay una nueva película de Terminator, el amigo Arnold está ahí, y la historia que conocías está a punto de cambiar.

Si colocamos la sinceridad por delante, lo cierto es que las reglas del juego se modificaron durante la noche del 12 de mayo de 1984, cuando aquellos dos guerreros del futuro se enfrentaron en una Los Angeles caótica, concentrando el destino de la resistencia humana en una joven camarera y su hijo que aún no había nacido. El gran dilema detrás de los viajes en el tiempo es que nunca saben cuándo detenerse, especialmente si se transforman en el recurso de una inteligencia artificial decidida a acabar con la raza humana. La primera película de la saga Terminator trató de limitar algunas de las ventajas asociadas al viaje temporal. Esto se hace evidente gracias a pequeños detalles como el primer T-800 buscando a las múltiples Sarah Connor en la guía telefónica. La simple existencia de Terminator 2 establece que los viajes al pasado son un recurso renovable, y en ese punto es en el que muchos fans prefieren detenerse, debido a los conflictos y las interpretaciones alternativas que han introducido los trabajos posteriores. Ahora, ¿qué pasa cuando los propios eventos de la Terminator original quedan en jaque? ¿Qué tal si en vez de apuntar hacia 1984, Skynet decide colocar la aguja del dial un poco más abajo?

El resultado es nada menos que Terminator: Genisys, en esta oportunidad a cargo de Skydance Productions (la aventura legal de la franquicia ha sido colorida como mínimo), y distribuida por la gente de Paramount. Veamos: El comienzo del trailer se mantiene en línea con los hechos de la primera película. La Resistencia captura la máquina temporal de Skynet, y un John Connor con el rostro medio destrozado envía a Kyle Reese al año 1984 para salvar a su madre. John describe a su madre como una mujer asustada y débil en esa época, pero lo que encuentra Kyle (asumiendo que realmente llegó a 1984 y no a otro año) es una versión de Sarah Connor lista para la guerra, un T-1000 que se troza a sí mismo para arrojar lanzas metálicas, y un T-800 que ha protegido a Sarah desde que era una niña, ya que en su infancia otro Terminator eliminó a sus padres, pero no pudo hacer lo mismo con ella.

¿Quieres un vaso con agua? Creo que yo necesito una botella entera. Faltan muchos detalles de trama y continuidad por resolver, pero a pesar esto, voy a colocar a Terminator: Genisys en mi lista. Obviamente, a la cabeza de todo el reparto aparece Arnold Schwarzenegger. Sus acompañantes son la bellísima Emilia Clarke (Daenerys Targaryen en Game of Thrones) en el papel de Sarah, Jai Courtney (Jack Reacher, Spartacus) como Kyle Reese, Jason Clarke (Zero Dark Thirty) asumiendo el rol de John Connor, y Matt Smith (el “11th Doctor” en Doctor Who) cuyo personaje aún está envuelto en misterio. El nuevo T-1000 es Lee Byung-hun, y el “otro” T-800 cae bajo la responsabilidad de Aaron V. Williamson. El director de la película es Alan Taylor (Thor: The Dark World), mientras que entre los productores encontramos a David Ellison y Dana Goldberg (ambos en MI: Ghost Protocol, ST: Into Darkness, World War Z). Terminator: Genisys llegará a las salas el 1 de julio de 2015, y aunque parezca mentira, sus dos secuelas ya tienen fecha para 2017 y 2018.