Modo Turbo para Raspberry Pi

Los entusiastas del hardware han estado haciendo muchas cosas con el Raspberry Pi. Algunos ejemplos ya han pasado por nuestro sitio, pero en cuanto a rendimiento se refiere, tanto el overclocking como el overvolting son prácticas relativamente comunes entre sus dueños. Bajo condiciones previas, el overvolting del procesador del Raspberry Pi anula la garantía, pero ahora, después de realizar varias pruebas, sus creadores han habilitado el uso de un nuevo “Modo Turbo” en la más reciente imagen de Raspbian. En su máxima configuración, el Raspberry Pi puede aumentar su rendimiento en un 57 por ciento, sin afectar la garantía de fábrica.

El Raspberry Pi posee un SoC Broadcom BCM2835 que opera a 700 Mhz. Esta frecuencia es más que suficiente para muchos proyectos basados en este SBC, pero a medida que se hace más amplia la compatibilidad de software, algunos usuarios tienen el deseo y/o la necesidad de exprimir un poco más al SoC. Allí es en donde aparecen el overclocking y el overvolting. Ambas prácticas están soportadas en el Raspberry Pi, y aunque la primera no tiene mayores inconvenientes (siempre y cuando se haga bien), aplicar overvolting provocaba una anulación de la garantía (un sticky bit en el SoC revela si se hizo o no). Teniendo en cuenta el precio del ordenador, no debería ser demasiado complicado reemplazarlo, pero con el largo proceso de envío y entrega, es lógico pensarlo más de una vez.

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Ahora, la historia es diferente. Después de haber realizado varias pruebas, los responsables del Raspberry Pi conocen mucho mejor cuáles son los límites de voltaje y temperatura que puede tolerar el SoC. En consecuencia, la última imagen disponible de Raspbian tiene habilitado un nuevo Modo Turbo, que habilita al usuario a modificar dinámicamente frecuencia y voltaje sin correr el riesgo de perder la garantía. El Modo Turbo posee un total de cinco perfiles, y el más alto de ellos lleva la frecuencia a 1 Ghz. Cuando el SoC alcanza una temperatura de 85 grados centígrados, la función del Modo Turbo se verá reducida para preservar la integridad del hardware.

Los fabricantes del Raspberry Pi aclaran que el overclocking final dependerá de varios factores, incluyendo la calidad de la fuente de alimentación utilizada. También recomiendan ejecutar la versión especial de Quake 3 como prueba de estrés, y en caso de que el overclocking sea demasiado alto como para impedir el correcto reinicio del SBC, sólo es necesario mantener presionada la tecla “Shift” durante el arranque para regresar al Raspberry Pi a su frecuencia normal. De acuerdo a las pruebas de rendimiento sobre enteros, punto flotante y memoria, el Raspberry Pi operando a 1 Ghz tiene un aumento en su rendimiento que promedia el 57 por ciento. Como siempre, la nueva imagen de Raspbian también incorpora otras mejoras en WiFi, audio y USB, por lo que su descarga es muy recomendada.