El año era 1997. Los Simpsons llegaban a su novena temporada, «el principio del fin» de acuerdo con muchos fans. La Fox decidió organizar un concurso, y solicitó a la gente de Kaufman & Broad que construyera una réplica de la casa Simpson para entregar como premio. Los colores, los interiores… nada escapó a los ojos de los diseñadores que hicieron un sólido trabajo, pero ni siquiera la popularidad de la serie impidió que la casa termine con un destino más genérico, por así decirlo.
La novena temporada de Los Simpsons comenzó el 21 de septiembre de 1997 en los Estados Unidos, y a modo de celebración, la Fox unió fuerzas con Pepsi y Kaufman & Broad para lanzar un concurso a nivel nacional que entregaba como premio una réplica de la casa Simpson. Así es: La inolvidable vivienda de Avenida Siempreviva 742 había llegado al mundo real en Henderson (Nevada), no muy lejos de la ciudad de Las Vegas. Kaufman & Broad la construyó en menos de dos meses, y más de 15 millones de personas compitieron para obtener sus llaves. La ganadora del concurso fue una mujer de Kentucky llamada Barbara Howard, y cuando le permitieron elegir entre la casa (con un valor aproximado de 120 mil dólares) y un premio en efectivo de 75 mil dólares… tomó el dinero porque no podía mudarse tan lejos de su granja, y su familia no estaba en condiciones de hacer semejante mudanza.
La casa fue vendida en el mercado general tres años más tarde (después de retirar 1.500 elementos relacionados con la serie), y se convirtió en una de las primeras del nuevo emprendimiento urbano que había comenzado en la zona. Ahora, ¿acaso podemos decir que se trató de una réplica exacta? Tal vez en su interior eso sea cierto, pero el ojo entrenado detectará rápidamente algunas diferencias importantes en el exterior, que van desde la escala y el número de ventanas hasta la forma de la chimenea (falsa). Los dueños actuales de la casa, que por el momento se han tomado con mucha tranquilidad las ocasionales visitas de los fans, crearon una página en Facebook donde podemos encontrar detalles adicionales. Al ser parte de una HOA (Homeowner Association), la casa debió adoptar un color más neutro, en línea con el resto del vecindario.
Como era de esperarse, la casa Simpson no es el único desarrollo a gran escala inspirado en la serie. En la ciudad de Ituzaingó (Buenos Aires, Argentina), un fan llamado Rubén Díaz tuvo la idea de crear una réplica de la taberna de Moe. Se supone que la inauguración iba a ser el pasado 13 de diciembre, pero no tenemos novedades al respecto. Lo que sí sabemos es que Díaz no está satisfecho con la taberna, y ha propuesto la creación de «La República de Springfield», una zona turística temática completamente dedicada a Los Simpsons, que incluirá la hamburguesería de Krusty, el supermercado de Apu, la escuela de Bart y la tienda de donas, además de otro clon de la casa Simpson.
Que lástima, pero bueno, la hicieron para que se habitara y como tal, tuvo que seguir su curso.