Suena como una contradicción, pero no lo es. KDE es conocido por ser el entorno gráfico principal de muchas distros de Linux allá afuera, aunque también puede ser utilizado como reemplazo de otros entornos. Otra función importante de KDE es otorgar soporte para aquellos programas que fueron creados especialmente para ejecutarse en ese entorno, y allí es en donde entra esta versión especial para Windows. Esta versión de KDE para Windows tiene como objetivo proveer de la compatibilidad suficiente a aquellos programas que dependen de este entorno, pero que al mismo tiempo puedan y deban ejecutarse bajo una instalación de Windows.
Recuerdo un viejo chiste que hizo un colega mío hace algunos años, al hacerse pasar por un cliente que entra por primera vez a una tienda de informática diciendo: "Hola, necesito D.O.S. para Windows". Uno puede reírse ante la incongruencia, pero si cambiamos al D.O.S. por KDE, de repente las cosas no parecen tan descabelladas. Lo que vemos usualmente de KDE es su frente gráfico, los detalles de su interfaz y la disposición de sus items. En otras palabras, vemos su entorno porque conocemos a KDE como tal. Pero KDE puede hacer otras cosas además de darle una apariencia a un escritorio para que sea más sencillo de utilizar. Algunas aplicaciones necesitan determinados archivos del entorno KDE, y gracias a la magia de la modularidad y los paquetes, cualquier dependencia es resuelta de forma automática en la gran mayoría de los casos.
Entonces fue que alguien tuvo la idea de que si eso podía lograrse en Linux, también podría hacerse en una instalación de KDE para Windows. Así es como nació esta versión especial de KDE para el sistema operativo de Microsoft. Cualquier aplicación que haya sido diseñada para KDE debería poder ejecutarse bajo Windows si esta versión se encuentra instalada. De todas formas, los desarrolladores todavía están trabajando en esto. KDE para Windows es experimental por donde se lo vea, y todavía está muy lejos de alcanzar una versión optimizada y lista para el uso cotidiano. Muchas de sus configuraciones deben realizarse a mano editando archivos, y muchas funciones no están disponibles.
Aún así, decidimos descargar una copia e instalarlo para obtener algunas imágenes. El instalador ocupa poco más de 1.5 MB, pero el tamaño final de la instalación depende de la cantidad de paquetes que se escojan. La instalación en sí no es algo que se pueda considerar sencilla: Se deben especificar varios valores como qué versión de KDE se va a instalar, a través de qué "mirror" se descargarán los archivos y qué clase de conexión a Internet se tiene, ya sea directa o a través de un proxy . La sección en la que se deben elegir los paquetes a instalar es bastante confusa, debido a que la descripción de los mismos es generalmente pobre. El tamaño de algunos paquetes puede ser muy grande, por lo que escoger un buen servidor de la lista es crítico para lograr una instalación rápida. La diferencia es enorme: En algunos servidores no podíamos pasar de 55 Kb por segundo, mientras que en otros logramos transferencias de 250 KB/s.
Realizamos una de las instalaciones más básicas, y como era de suponerse, el repertorio de aplicaciones que viene con KDE es reducido. El mejor ejemplo de la presencia de KDE en el sistema puede mostrarse a través de Konqueror, navegador por defecto del entorno. Quienes pueden acompañar a Konqueror son Dolphin (gestor de archivos), y el siempre presente KWrite, una especie de híbrido entre el Bloc de Notas y el Wordpad de Windows. Para instalar aplicaciones adicionales, el FAQ de KDE recomienda volver a ejecutar el instalador y escoger los paquetes necesarios. No es un método demasiado cómodo para trabajar (no encontramos a KPackage por ningún lado), pero al menos funciona.
En cuanto al rendimiento de KDE bajo Windows, mucho no se puede decir por el momento. Las aplicaciones tardan en iniciarse y el consumo de memoria de cada una de ellas es monstruoso, lo cual se vuelve más complicado si tenemos en cuenta la pésima administración de memoria que Windows tiene por defecto (SuperFetch puede haber mejorado las cosas en Vista, pero no tanto). Otro punto muy importante que indica el estado temprano de esta versión de KDE es que no posee un desinstalador nativo. Hay que ejecutar el instalador (otra vez), escoger la opción para remover paquetes, y luego borrar manualmente todas las carpetas que quedan en el sistema. Además, mucho de su material de ayuda parece no estar disponible. Hemos visto varios tutoriales, pero al buscar información específica nos hemos topado con algunos mensajes de error.
KDE dispone de aplicaciones muy interesantes, y el código abierto siempre es una opción atractiva en lo general. El poder acceder a esas aplicaciones bajo Windows es algo bienvenido, pero nadie niega que a la versión de KDE para Windows le queda mucho trabajo por delante. Principalmente, deben mejorar tanto el método de instalación como el agregado de aplicaciones, luego solucionar problemas de estabilidad (aunque debemos admitir, no se colgó nunca en nuestras pruebas) y finalmente atender al rendimiento. Si sientes curiosidad, nada te impide descargarlo e instalarlo, pero no olvides que estás lidiando con un software en desarrollo. Ten paciencia.
Se ve mu prometedor, pero yo me acostumbre a gestionar todo con total commander. Es mucho mas eficiente en navegación, gestión de archivo y demás tareas. Ahora me gustaría dale un nuevo toque con KDE para win lo probare ^_^
Si es cierto que kde funciona bajo windows, la inmensa malloria de sus aplicaciones, pero me gustaria aprovechar para decir que no me parece nada bien que este proyecto se instale en windows, es una forma de ayudar a microsoft, todo en kde es demasiado bello y bueno para el pesimo guindos, dolor de estomago me da cuando veo amarok o dolphin corriendo en guindos.Antes utilizaba kde pero desde que salio la version para win solo utilizo gnome en mi ubuntu.Lo sientos chicos de KDE pero desde linus trovarld hasta pienso el ultimo linuxero, osease yo, creo que no estamos de acuerdo con esto.
a mi mucho la idea no me gusta, pero si pensamos que puede ser una forma de acercar a los usuarios de windows, a linux por medio de un entorno gráfico, para q se vallan acostumbrando, me parece una buena idea…
los que usamos un wintendo y usamos linux como sistema operativo, por lo menos tenemos una forma de hacer q windows no nos parezca tan windows.
(yo tmb uso gnome como interfaz)
osea si se cuelga el windows (un pantallazo azul) ¿a quien le hecharan la culpa ahora los de microsoft a KDE?
seguro que a kde, pero la culpa todos sabemos q la tiene ellos
Estoy de acuerdo con Rafaelascencio: porqué hacen ésto los desarrolladores de SL ?.
Acaso Hasefroch ya tiene sus herramientas Visual portadas a GNU/Linux ? o ya portaron el MS-Office para que funcione de modo nativo en GNU/Linux ?.
El que quiera el cubo de Compiz, el Amarok y todas las cosas maravillosas que tenemos en GNU/Linux (incluyendo los entornos de escritorio) que cambie de sistema operativo y punto.
Ya quisera ver a los de Apple poniendo sus programas a correr sobre las plataformas de Hasefroch.
No puede ser que existan usuarios que se dicen "Linuxeros" y estén descontentos con la libertad del usuario. Parece que quieren que la comunidad de software libre se comporte como lo hace microsoft y parecidos… en verdad, me dan bastante pena.
Un punto para los desarrolladores que nos entregan su trabajo desinteresadamente, y que dejan de andar pensando en estupideces de "guerras santas" con el fin de ayudar al usuario.
Viva el Software Libre, y viva la LIBERTAD de toda la comunidad.
Hasta que veo una persona seria sobre este tema.
Felicidades.
Asi se se habla amigo, Viva el software libre y La Liberta de toda la comunidad!!
Un comentario inteligente, directo y como debe ser, sin la burradas de "este SO es el mejor por que yo lo digo" y esas barrabazadas que ya cansas y dejan quedar mal al que los escribe (por hacer mas, hacen menos).
Viva la libertad de eleccion y muerte a los fan-boys de Windows, los seudo-adoradores de Linux y los gomelitos de Mac!!!!