En el laboratorio Ishiwaka-Namiki Komuro están desarrollando un módulo que sería capaz de procesar información y pasarla a unidades vibro-táctiles que estarían en contacto directo con la piel. Esto permitiría que una persona pudiera detectar su entorno como lo hacen los gatos a través de sus bigotes.
El dispositivo en desarrollo tiene por objetivo generar módulos que puedan llevarse sobre la piel en la forma de una prenda de ropa con sensores. La función ayudaría a los usuarios a percibir y responder a información espacial usando tecnología háptica en una forma intuitiva y no intrusiva. El sistema esta compuesto de un conjunto de “módulos de cabello óptico”, cada uno de los cuales percibe un rango de información y lo transfiere como un sistema vibro-táctil apropiado a la piel que hay debajo. Así, la superficie de nuestra piel verdadera podría detectar una obstrucción antes de dar con ella. Los científicos dicen que el dispositivo que están desarrollando tendrá mucho en común con estructuras biológicas como el cilio celular, antenas de insectos y bigotes sensitivos de mamíferos. Y quizás no sería totalmente errado considerarlo como un traje de ecolocalización que aumenta los sentidos a lo Daredevil (sin la radiación o super-oído, claro está)
Se conciben distintas posibilidades para la implementación de este dispositivo, sea cubriendo regiones precisas o distribuido por toda la superficie del cuerpo como una piel secundaria con capacidades sensoriales superiores. El primer prototipo desarrollado por el laboratorio constó de una configuración en una banda para la cabeza que provee al portador con una conciencia espacial de 360 grados. Los experimentos realizados tuvieron revisiones muy positivas.
Se espera implementar la tecnología en prótesis para personas con discapacidades visuales, y como un aumento de conciencia espacial para aquellos que trabajen en entornos potencialmente riesgosos. También consideran una aplicación para coches que podría mejorar la conciencia de obstáculos para el conductor.