Cómo crear archivos MP3 con LAME

Si eres de aquellas personas que gusta convertir sus CDs de audio a formato MP3 para tener tus temas favoritos de música a la mano, entonces es probable que ya uses algún software para lograr tu objetivo. Hay muchos programas flotando en la red que hacen uso del codificador LAME, pero no son muchos los que comprenden el compresor que puede utilizarse por línea de comandos. Nosotros te enseñamos a usarlo.

El codificador conocido como LAME es uno de los más utilizados por muchos programas freeware a la hora de ofrecer al usuario una solución fácil para crear archivos MP3. Estos programas permiten realizar sencillos ajustes gracias al uso de deslizadores y reguladores para especificar la calidad final del archivo. Sin embargo, la utilización de estos programas puede dejar afuera a algunos parámetros extra que posee LAME, y que otorgan al usuario un nivel superior de ajuste para sus MP3.

Estos parámetros se usan con la versión ejecutable de LAME, que puede correrse sólo bajo la línea de comandos de Windows, y otros entornos similares. Al utilizarlo de esta forma, algunas limitaciones básicas se hacen presentes, como el no poder manipular con comodidad múltiples archivos, pero si el tener que escribir a mano el nombre de un tema es lo menos que te molesta, y estás más interesado/a en la calidad final del archivo, entonces deberías utilizar esta forma para comprimir archivos de audio.

Todos los parámetros avanzados de LAME están explicados en el archivo llamado switchs.html, que viene junto al ejecutable de LAME, pero nosotros te explicaremos los que son más relevantes para tu uso:

-m: Especifica el modo en que será codificado el archivo MP3. Sus modificadores son "s", para estéreo puro y duro, "j" para Joint Stereo, "f" para Joint Stereo forzado, "d" para canales duales, y "m" para Mono. Aunque muchos programas utilizan el modo Joint Stereo, si la idea es ser lo más purista posible, te recomendamos usar la opción de estéreo.

-b: Especifica el bitrate mínimo que usará LAME al comprimir. Depende mucho del tipo de compresión que uses, si es constante o variable. Sea cual sea, no te recomendamos bajar de 128 kbps.

-q: Especifica la calidad de codificación. Cuanto más bajo el número, más calidad tendrá el archivo. El valor más bajo que puedes usar es 0.

–cbr y –abr: –cbr activa el modo de bitrate constante, o sea, que la calidad final será determinada por el valor del parámetro -b. –abr utiliza un valor de bitrate promedio, en el cual LAME comprimirá el MP3 de acuerdo al valor de promedio que especifiques. Si debes hacer una compresión en un valor muy bajo, por ejemplo, 128 kbps, y no subir de eso, te recomendamos usar –cbr sobre –abr. En cambio, puedes usar –abr si quieres darte un lujo extra en cuanto a calidad, pero al mismo tiempo deseas que el archivo MP3 se mantenga lo más pequeño posible.

–vbr-old y –vbr-new: Estos dos parámetros activan el modo de bitrate variable. La diferencia entre ellos es que uno utiliza el viejo algoritmo de compresión de LAME, mientras que el otro usa un sistema más nuevo. El sistema nuevo es sustancialmente más rápido a la hora de comprimir, pero está comprobado que el viejo método logra crear archivos un poco más pequeños, sin perder calidad.

-V: Este último comando especifica la calidad de compresión en el modo VBR (variable). Al igual que sucede con el comando -q, cuanto más bajo sea, mayor calidad tendrá el archivo. El menor valor posible con -V también es 0.

Ahora bien: Si no quieres tener problemas con la calidad, y no te importa en lo más mínimo el espacio, debes usar el parámetro -b con un valor de 320 kbps, con -q igual a 0, en modo –cbr, y en formato estéreo. Este sería un ejemplo:

Para experimentar un poco con estos valores, usaremos el tema de Michelle Branch, "Are You Happy Now" (como siempre, tenemos el CD, así que, discográficas, ¡shoosh!). Primero, necesitarás un tema en formato WAV. Cualquier versión de Nero puede ayudarte a extraer una pista de audio de un CD y convertirla en formato WAV. Otros programas pueden convertir la pista directamente a MP3, pero sus compresores tal vez no sean tan avanzados como LAME. Primero, usaremos una compresión como la que mencionamos antes:

Nota el tamaño final del archivo, 8.66 MB. También debes tener en cuenta dos cosas: El nombre del tema fue puesto entre comillas, lo que evita cualquier problema en caso de que el nombre contenga espacios. También deberás corregir el nombre ya que LAME coloca la extensión anterior como parte del nombre en el MP3 nuevo (observa el círculo rojo, y mira que el nombre termina en .wav.mp3, remueve el .wav para evitar problemas). Ahora utilizaremos una configuración más compleja, activando el modo VBR en su versión antigua, con calidad al máximo, y una base mínima de 128 kbps:

  ¿Notas la apariencia diferente de la ventana? LAME aplica la compresión necesaria según cada rango de kilobits disponible. El modo VBR es una excelente forma de lograr equilibrio entre compresión y calidad final. El tamaño del archivo con esta configuración bajó a 5.69 MB, lo cual hace que el archivo ya sea mucho más cómodo de manejar, y reduciendo la pérdida de calidad a un mínimo. Ahora, supongamos que deseas compartir este tema con alguien, y debes subirlo a Internet. Lo ideal, para reducir tu tiempo de subida, y el tiempo de bajada de quien reciba el archivo, es reducir su tamaño lo más posible. Para estos casos, se suelen utilizar 128 kbps de base, con bitrate constante, en modo Joint Stereo:

El tamaño bajó a unos muy portables 3.46 MB. De esta manera, sería algo muy sencillo y rápido enviar el tema por e-mail, reduciendo los tiempos tanto de subida, como de bajada. En todos los casos, recuerda que LAME agrega la extensión como parte del nombre del archivo. Haz la corrección que creas necesaria.

Bien, si has llegado hasta aquí, y te preguntas por qué has de tomarte toda esta molestia para comprimir archivos MP3, sería lo mismo que preguntarle al usuario de Linux por qué recurre a algo como Konsole (o xterm, o GNOME terminal, según el entorno que use) para realizar tareas, o por qué el usuario de Mac podría tener necesidad de abrir una ventana de consola en OS X. Lo hacen para tener un mayor control, flexibilidad, y cantidad de opciones disponibles, que le permiten al usuario alcanzar una configuración más avanzada y refinada. LAME te permite hacer esto, y una vez que hayas convertido un par de temas, difícilmente querrás volver a un programa con entorno gráfico. ¡Buena suerte!