Estas son las cosas que nos encantan del CES, productos que nos hacen babear en espera del lanzamiento.
Las fotos hablan por sí solas, y quizás dicen más de lo que nos gustaría saber. Del lado que nos deja asombrados, tenemos un monitor con procesado digital de luz (DLP) iluminado por LEDs, que se curva para aumentar la experiencia de juego con una sensación envolvente (y unos 3 pies de extensión). El tiempo de respuesta es de .02ms lo que lo hace perfecto para vídeojuegos, aunque la resolución llama un poco la atención. 2880×900 hace que uno se replantee la opción. Si bien hay varios juegos que soportan esa resolución hay muchos que quedan fuera, y 900 píxeles de altura siguen pareciendo poco.
Del lado de las contras está el tamaño y – seguramente – el peso. Para el camino que va tomando la tecnología, la profundidad del monitor es un paso atrás. No es absurdo pensar que en poco tiempo salga un LCD más fino y liviano. De todas formas, por el momento, esta bestia de Alienware no deja de llamar la atención y tentar a los jugones. Sin información de precio, se sabe que estará disponible para la segunda mitad del año (en que habrán corregido las barras que marcan los cuatro sectores de la pantalla)